Derechos HumanosGobiernoInicio

Pueblo de ‘La Laguna’ es necesario incorporarlo al padrón de pueblos originarios: CEDHJ

Por: Celia Espinoza

24 de agosto de 2020.- La Comisión Estatal de Derechos Humanos en Jalisco (CEDHJ) en su Recomendación 26/2020 sobre la de San Juan Bautista de la Laguna, “considera necesario” que esta comunidad de origen indígena sea reconocida por parte de las autoridades municipales y estatales e incorporada al padrón de pueblos originarios para reconocer su origen, cultura, historia e identidad.

La introducción del ducto y los trabajos de la empresa Gas Natural del Noroeste generó una violación de los derechos al desarrollo, al patrimonio cultural y a un medio ambiente sano y equilibrado, de los habitantes de San Juan Bautista de la Laguna de Lagos de Moreno, así comoa la legalidad y seguridad jurídica, a la manifestación pacífica, a la libertad personal, a los derechos de pueblos originarios y comunidades indígenas.

Esta Comisión considera necesario que la comunidad indígena de San Juan Bautista de la Laguna, sea reconocida por parte de las autoridades municipales y estatales e incorporada al padrón de pueblos originarios para reconocer su origen, cultura, historia e identidad. Que sea tomada en cuenta no sólo como potencial industrial por la riqueza de terrenos y agua en el subsuelo de su territorio, sino para establecer proyectos económicos, laborales y de infraestructura básica, en beneficio de sus habitantes, respetando su identidad y autonomía como pueblo originario”, precisa la recomendación de los Derechos Humanos en Jalisco.

La Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ) atendió las quejas presentadas por integrantes de la comunidad indígena de San Juan Bautista de la Laguna en municipio de Lagos de Moreno, quienes se inconformaron en contra de diversas autoridades federales, estatales y municipales.

Manifestaron que las autoridades federales y municipales de Lagos de Moreno otorgaron permisos para la instalación de un gasoducto subterráneo que pasa por su comunidad, y sin el consentimiento de algunos miembros y autoridades tradicionales de su pueblo, dieron inicio a la obra.

Debido a las protestas y manifestaciones de algunos habitantes, el gobierno municipal y el gobierno del Estado –mediante el uso de la fuerza pública estatal y municipal– reprimieron una de las manifestaciones, y remitieron a los que encabezaban la protesta a la Fiscalía del Estado (FE); a dos de estas personas se les imputó una falta administrativa y tres más fueron remitidos a la agencia del Ministerio Público de Lagos de Moreno, donde hasta la fecha se encuentran en trámite dos carpetas de investigación.

Con dichas acciones (independientemente de las omisiones de las autoridades federales, que ya se hicieron del conocimiento de la Comisión Nacional de Derechos Humanos), las autoridades municipales y estatales, en lugar de cumplir con el proceso de consulta previa, libre, informada, de buena fe y culturalmente adecuada, indispensable para la autorización de cualquier proyecto que afecte territorios de pueblos originarios, las primeras otorgaron la licencia para la realización de la obra, con el apoyo para su implementación del gobierno del Estado a través de la Secretaría de Seguridad Pública.

Durante la investigación se advirtió que, además de las violaciones mencionadas, existe incertidumbre jurídica de los miembros de dicha comunidad en el tema de su reconocimiento como comunidad indígena, ya que esta no es reconocida por la Comisión Estatal Indígena; lo que incumple lo dispuesto en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre Pueblos Indígenas y Tribales.

También se advirtió una situación de abandono en el territorio que ocupa el pueblo indígena, condición que se ha dado por diversas razones; una de ellas es la falta de interés de administraciones municipales pasadas y la actual, ya que aun cuando el pueblo de La Laguna colinda con la ciudad de Lagos de Moreno, y actualmente se encuentra muy unido a ella en los temas económico, social y urbanístico, aun así se le ha dejado en el abandono.

Muchos de sus habitantes carecen de los servicios públicos elementales como agua, drenaje y electricidad, alumbrado público, banquetas y machuelos. Se ha dejado secar una laguna, a la que por muchos años no se le brindó mantenimiento, y al día de hoy solamente se presentan encharcamientos en esa zona durante el temporal de lluvias, y desafortunadamente sirve como vertedero de drenajes de industrias agrícolas y ganaderas; vulnerando con ello además el derecho al paisaje y al patrimonio cultural y ambiental de la comunidad, así como a diversas disposiciones ecológicas, ya que este sitio (emblemático del pueblo, y que dio origen a su nombre), se ha convertido en un lugar abandonado y en un foco de infección”, precisa el documento emitido por esta dependencia estatal.

Estas omisiones constituyen violaciones a los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales, y de no tomarse medidas restitutorias inmediatas, se provocará una pérdida irreversible ocasionada por la indebida planeación, la inminente urbanización y el crecimiento de la ciudad de Lagos de Moreno.

 Esta situación afecta los derechos a un desarrollo sostenible y sustentable, así como a la calidad de vida de sus habitantes; de acuerdo con lo dispuesto en las Directrices Internacionales sobre Planificación Urbana y Territorial, que sirven de principios rectores a escala internacional y que fueron emitidos por ONU-Hábitat, en donde se señalan acciones de gobernanza y políticas urbanas, planificación urbana y territorial para el desarrollo sostenible y sustentable.

Te dejamos el link con la recomendación emitida por la CEDHJ.

http://cedhj.org.mx/reco2020.asp

Celia Espinoza

Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad La Salle Bajío; candidata al titulo de Maestra en Política y Gobierno por el Colegio de León; ha sido periodista en Radio U. de G. Periódico AM Lagos, el sitio digital El Río-Lagos y colaboradora de algunos otros medios locales y regionales.